todos tenemos nuestras manias.
yo, por ejemplo, cuando entro a probarme ropa en una tienda no me quito ni los zapatos hasta que no me he asegurado que no hay ninguna camara filmando.
sabiendo esto, os podeis imaginar el agobio que siento cada vez que entro en la ducha y veo a este ser ahi, observandome con su mirada bizca
miércoles, noviembre 08, 2006
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10 comentarios:
En cambio bien permites, quizás con agrado, que los desconocidos escudriñemos por aquí.
Curioso (en más de un sentido) cruce entre Kirchner, Bowie y el protagonista de "Cortocircuito".
Qué buen fisonomista, al!
Y mejor persona. ;-)
aha! has cambiado la grafica. mira.
Yo te entiendo, no te sientas rara y sola, yo jamás me pruebo los zapatos al comprarlos, y tengo miles, y extraña es la vez que me pruebo la ropa.
No me fio de los desconocidos.
tal vez por eso tenemos miles de zapatos, por no probarlos ;)
Yo no puedo dormir con la puerta del armario abierta porque mi ropa me mira... y a veces me habla.
No volveré a ducharme tranquilo.
jejeje a mi me pasa con los coches... todos me recuerdan caras... enfadados, tristes, sonrientes...
Salud!
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