no todos los relojes tienen tiempo.los hay quisquillosos y tiranos, tan ocupados en marcar los segundos que no tienen tiempo para nada más, y los hay lentos y perezosos que se quedan atascados al subir la cuesta después del seis...
cuando me enamoré (al instante) de este reloj de la fantástica misako mimoko me sorprendió que marcase las 5. "la hora del te", pensé, sin darme cuenta que el reloj era más listo que yo.
sólo un reloj sin tiempo/con todo el tiempo del mundo (es lo mismo) podía llegar en el momento adecuado, hora justa, segundo preciso en el que el clubazul cumplía 5 años.
yo lo voy a celebrar perdiendo el tiempo un rato. total, seguirán siendo las 5...
gracias a todos por seguir tan azules como yo :)
13 comentarios:
¡Felizul cumpleaños!
Palabra antispam: zenate. (Zena + te = cena + té = té + cena.) ¿Hace?
¡hace! pero tendremos que cenar a las 5... (cosas de mi reloj) :)
Feliz cumpleaños! los relojes deberían detenerse siempre que ocurre algo bueno :)
es una pedra? , una goma d'esborrar?,
com ho has fet. Perqué tothom pensa o diu que son les cinc del té, poden ser les cinc d'ensaimada.
Si m'ho preguntes t'ho aclareixo
En tot cas felicitas!!
pel tema del aniversari. eh!!
MuNh, no l'he fet jo, sino l'Eva de Misako Mimoko. El material és porcellana russa. Prefereixo mil vegades l'hora de l'ensaimada a la del te! O potser podríem rebatejar les 5 com l'hora del te i ensaimada? (Realment cal que ho pregunti? Explicació ja!)
Doncs, fet ensaimada i té o "sigalò". Bé el trema de l'ensaimada..., a Barcelona, carrer Compte d'Asalt (?), (un carrerò transversal) hi ha un forn que fan les ensaimades farcides de cavell d'angel. A les cinc del matí obren el portal d'arradera i les pots comprar. Despres d'aver estat passegant per les Rambles.
Superchulo!!! El tiempo no existe!!!
¡Feliz lustro lustroso, Ari!
feliz aniversario Ari!
el reloj es precioso.
felicidades por el blog!!
que bonito el reloj de misako mimoko..
Pero eso es maravilloso! Podrás tomar el té con pastelitos tantas veces lo desees. Claro que ten cuidado... ya ves cómo acabó el Sombrerero Loco
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